"Querido Mou, querido Iker". Con este gesto familiar inició el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, su discurso de bienvenida al Ayuntamiento a los jugadores del club blanco, que ofrecieron a la ciudad la Copa del Rey recientemente conquistada. "Cibeles es más vuestra que nuestra.
Y la prueba es que la Copa que llevaba Sergio Ramos no se cayó, sino que se emocionó tanto en la plaza que saltó a ella", dijo el alcalde.
"Nada representa mejor a Madrid que el Real Madrid y eso es una responsabilidad que lleváis con orgullo. Yo no voy mucho al fútbol, pero estuve en Amsterdam, París y Glasgow (escenarios de las tres últimas finales de Champions que ganó el Madrid) y estaremos con vosotros siempre. Este es un éxito importante. Nada os puede hacer perder el orgullo", añadió.
A Mourinho se refirió especialmente y le dijo: "Se lo difícil que es lo que tienes que hacer y estoy muy orgulloso de lo que estás realizando". Y concluyó: "Sois un modelo para los jóvenes, unos campeones. Estoy seguro de que el que esté en esta casa el próximo año os recibirá tres veces".
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